Evasor de ataudes Capitulo 5

Una vez que terminaron en el almacén, Min sabía que todos querían ir a sus respectivas casas y lavarse el hedor de muerte. Desafortunadamente, él tenía que enfrentar toda la cuestión del cambio de liderazgo y sabía que cuanto antes terminara con eso, mejor, así que ordenó a todos que se reunieran en el centro de entrenamiento.

Tal como lo pensaron, Kyu no tomó bien la noticia. Cuando Min le reveló todo en la camioneta durante el viaje a la escena del ataque, Kyu había pasado por las etapas de duelo (Medico Psiquiatra suiza que describio las etapas de duelo: 1.- Negación-aislamiento, 2-Ira, 3.- Pacto o negociación, 4.- Depresión, 5.- Aceptación). O por lo menos los cuatro primeros.


En primer lugar Kyu se había sorprendido de que el Oráculo hubiera hecho un cambio tan drástico en tiempos turbulentos. Entonces Kyu empezó a regañarse por no hacer más para ayudar a su padre. Entonces él volvió su ira sobre Min por haber aceptado asumir el liderazgo, viéndolo como un acto de traición hacia su padre. De hecho, sus palabras exactas habían sido: —¿Cómo pudiste hacerle esto a tu propio padre? No eres más que un douchecopter (Douchecopter, al parecer significa tonto, pero se deja el original.) hambriento de poder.

Min se sentó en silencio y aceptó todo, porque sabía que si Kyu se enfurecía rápidamente, también se calmaría rápidamente. Una vez que lo hiciera se daría cuenta de que el movimiento sería para bien de todos los Protectores y de una extraña manera, para su padre.

Mientras el cuarto se llenaba para la reunión, Min se dio cuenta que su hermano se encontraba en la cuarta etapa del duelo —la depresión. Kyu se dejó caer en uno de los asientos en la parte posterior de la sala. Incluso se puso la capucha, como si quisiera protegerse a sí mismo del resto del grupo.

Una vez que todos estuvieron sentados, Min se detuvo un momento para contemplar a sus compañeros Protectores. Además de Kyu, estaba Jun, quien le dio a Min una pequeña sonrisa de aliento. Himchan que parecía simplemente aburrido. El primo de Min, Saeng, que parecía confundido. Hongki, el segundo más antiguo Guardián, estaba estudiando de cerca a Min. Era el más analítico del grupo, él era el más rápido para captar las cosas, y Min sentía con seguridad que Zayne había adivinado la razón de la reunión.

Los gemelos, KwangMin y YoungMin, estaban sentados, sus cabezas con cabello castaño oscuro juntas mientras murmuraban entre ellos. Min no tenía ni idea de lo que podrían estar hablando. Como luchadores que eran ambos, el tema podría ser cualquier cosa que hubieran encontrado en la fábrica o en el último episodio de la trama de The Walking Dead.

Dejó al último Protector, Zelo. Apenas saliendo de la adolescencia y no muy bien formado, era una especie del enano del grupo. Incluso sentado en la sala de aliados, parecía nervioso como el infierno mientras veía a través de un mechón de su rubio cabello que constantemente cubría sus brillantes ojos.

—¿Vas a decirnos por qué estamos aquí? —Himchan finalmente preguntó en voz alta.

Min se detuvo el tiempo suficiente para verlo antes de decidirse jalar la bandita de la herida y terminar de una vez. —La Oráculo ha retirado a mi padre de sus funciones.

Un jadeo colectivo se formó ante el anuncio de... bueno, con la excepción de Jun, Kyu y Hyun, quien se limitó a asentir como si hubiera estado esperándolo todo el tiempo.

—¿Por qué? —Zelo se aventuró con voz tímida a preguntar.

—Ah... tal vez porque ha bebido más que a menudo, últimamente —dijo Himchan con sarcasmo.

—No es necesario ser un imbécil. El chico estaba haciendo una pregunta válida —gruñó Hyun. Luego se giró a Min—: Así que estoy seguro que es seguro asumir que ella te nombró a ti como el nuevo líder.

—Sí, lo hizo. —Min se preparó para la reacción del grupo.

La mayoría asintió con satisfacción, pero Himchan frunció el ceño. —¿Cómo podemos saberlo a ciencia cierta? Podrías estar mintiendo para tener algo de poder.

Jun se dio la vuelta y le dio a Himchan una mirada asesina. —Min nunca mentiría sobre algo así. Si no le crees, entonces ¿por qué no vas y le preguntas a ella tú mismo?

Nadie se sorprendió cuando Himchan palideció ante la sugerencia. Aunque ella podía ser un poco cabeza hueca a veces, nadie quería correr el riesgo de enfurecer al Oráculo. Ella podría ser mortal cuando se enfurecía.

—Eso explicaría por qué ella no le asignó un Guardián a Min como lo hizo con el resto de nosotros —dijo Hyun.

Ahora que Hyun lo mencionó, Min se dio cuenta de que era un punto válido. Antes de eso, él siempre había dado por sentado que aún no se le había asignado uno debido a que el Oráculo no había encontrado el perfecto para él.

—¿Le has dicho a los Guardianes? —Minwoo le preguntó.

—No, voy a hablar con ellos después.

—Eso debe ser divertido.

En realidad, Min realmente no esperaba que ninguno de los Guardianes tuviera problemas con la nueva situación. Sabía que desde hacía mucho tiempo habían estado preocupados por las habilidades de liderazgo de su padre, así que probablemente estarían encantados.

—Hay algo más que tengo que decirles —Min continuó, bien podía sacar todo ahora.

—Oh, sorpresas, éste debe ser bueno —dijo Himchan arrastrando las palabras.

—El Oráculo dice que hay más Protectores.

Por una vez, esa realidad hizo que el grupo se quedara sin palabras. El silencio flotó en el aire durante varios minutos antes de que Himchan se encogiera de hombros: —Yo también imaginé eso.

Ahora fue Min quien se sentía aturdido. —¿Qué?

—Bueno, seguro. Sólo tiene sentido que algunas personas no estuvieran de acuerdo y hubieran abandonado el grupo en algún siglo. A pesar de ello, su línea de sangre continuaría.

—¿Saben quiénes son? —preguntó Jun.

Min pasó la mano por la cara. —El Oráculo no es muy buena en eso. Ella sólo dijo que ellos se perdieron en los registros.

Himchan resopló. —Eso podría significar cualquier cosa, que ellos no saben lo que realmente son, que hay Protectores afuera que nacieron odiándonos y que no quieren tener nada que ver con nosotros…

—Estoy pensando en que va a ser más como la segunda opción —Kyu finalmente habló.

—¿Cómo lo sabes? —Min desafió.

—Incluso fuera del grupo ellos todavía son un objetivo. No veo ningún padre que deje de buen grado ir a sus hijos ciegos sobre las amenazas que podrían enfrentar en el camino próximo.

Min dejó escapar un suspiro. Las cosas ahora parecían aún peor de lo que se pensaba originalmente. En lugar de que existiera un grupo de Protectores que no lo sabían y no estaban entrenados, ellos podían tener que enfrentar a un grupo de hostiles hombres que estaban tan capacitados y entrenados como Min y los demás. Y por como se oía eso, no serían muy agradables hacia sus compañeros Protectores.

—Aun así tenemos que encontrarlos y tratar de convencerlos de que nos ayuden en la luchar. Esta batalla está creciendo cada día y simplemente no hay suficientes de nosotros para cubrir todo el terreno que necesitamos.

—También podrías acercarte a algunos de los grupos paranormales más amigables y ver si ellos quisieran ayudar —sugirió Saeng.

—Sí, porque nuestra historia, con chupasangres y weres es muuuy definida —fijo Himchan arrastrando las palabras—. Estamos tan cerca de ellos que estamos a dos pasos de comenzar un álbum de recortes y un club de intercambio de recetas.

Los gemelos se rieron mientras que Jun le dio a Himchan otra sucia mirada. —Hey, he tenido la peor historia con los paranormales, pero aún creo que Saeng tiene una buena idea. Si vamos a contener esta amenaza, entonces necesitamos todos los aliados que podamos conseguir.

—¿Cómo estamos tan seguros de que va a ser tan malo? —Zelo preguntó—. Tal vez los paranormales están tan ocupados peleándose entre sí, que se olvidarán de la raza humana.

—Si la matanza de esta noche en la fábrica no es suficiente para darte una pista, entonces los malditos demonios slug con los que hemos tenido que lidiar debería de habértela dado —bufó Himchan.

Min lo fulminó con la mirada antes de continuar: —Aunque no me gusta la forma en que acaba de exponer las cosas Himchan, él tiene razón. Creo que estaba absolutamente en lo cierto. No sólo eso, sino que el Oráculo me dijo que las cosas se van a poner mucho peor.

Mientras seguía estudiando a Himchan, Min no podía dejar de pensar en una cierta línea de la profecía, «el mal vendrá desde dentro y amenaza con matarlos a todos». ¿Podría ser posible que Himchan fuera la fuente del mal? Aunque Min no quería ni siquiera contemplar la posibilidad de que un compañero Protector se volviera contra ellos, el hombre tenía un chip en su hombro del tamaño del río Detroit.

Kyu de repente se puso de pie y se dirigió a la parte delantera de la sala. Una vez que llegó con Min, Kyu cayó sobre una rodilla y dijo: —Yo te acepto como mi líder. Mi lealtad y mi espada te pertenecen.

El calor cubrió del rostro de Min sintiéndose avergonzado y al mismo tiempo consciente del gesto, especialmente cuando todos los demás Protectores de la sala se levantaron y siguieron su ejemplo. Cada uno de ellos, uno por uno, inclinando la cabeza hacia Min antes de hacer la misma promesa. Incluso Himchan lo hizo, lo que casi noquea a Min por el impacto.

Jun fue el último colocándose sin problemas en una rodilla. Al levantar la vista, su expresión era tan sumisa y dulce, que el deseo recorrió a Min. De repente se sintió contento por todas las gruesas capas de su uniforme, de lo contrario, Jun hubiera estado cara a cara con la prueba de la excitación de Min.

Eso no solo haría la escena bochornosa sino muy dolorosa.

Entonces, Jun habló. —Yo te acepto como mi líder. Mi lealtad, mi espada y yo, te pertenecemos.

Min tomó aire ante la forma en que Jun alteró el juramento. A juzgar por la tensa manera en que Jun se sostenía, no fue accidental.

Jun había admitido finalmente lo que Min esperaba desde hace tanto tiempo, que ellos se pertenecían. Es más, Jun lo había hecho en una habitación llena de testigos. Min no sabía qué había motivado el repentino cambio en la actitud de Jun, pero iba a aceptar la oferta, mientras que aun seguía ahí.

Se inclinó, tomó a Jun por el brazo y lo jaló suavemente, el Protector se puso de pie. Una vez que Jun estuvo de pie, Min presionó sus labios en un duro beso.

Maldición, Jun sabía bien. Tanto es así, que Min podría haber pasado el día siguiente explorando esos gruesos labios y esa dulce boca. Sin embargo, dado que no estaban solos, Min no tuvo esa oportunidad así que con gran renuencia se apartó.

Le dio gran satisfacción ver la aturdida, brillante y llena de lujuria expresión en los ojos de Jun. Frotando el pulgar por el labio inferior de Jun, Min dijo: —Y yo me comprometo con ustedes.

—¿Lo que sea que sucede con ustedes no será capaz de jugar con los demás? —Young Min le susurró a Minwoo.

—El Oráculo parece creer que Jun y yo hacemos una gran pareja —respondió Min, lo suficientemente fuerte para que toda la sala pudiera escuchar.

—¿Me pregunto si eso se aplica a todos nosotros? —Kwangmin, dijo.

Él y su hermano gemelo comenzar a ver a Minwoo como si fuera un bistec y ellos un shifter oso muertos de hambre. Kwangmin tragó un par de veces y realmente comenzó a buscar la salida, como si estuviera buscando retirarse.

No iba a desperdiciar esa gran oportunidad, Min sonrió. —Oh, estoy seguro de que lo es. He oído que Minwoo está muy, muy solo.

Cuando los gemelos comenzaron a avanzar lentamente hacia él, Minwoo gruñó desde la esquina de su boca: —Me desquitaré de esto.

Min no tenía dudas de eso ni por un segundo, pero él estaba demasiado ocupado disfrutando de la incomodidad del otro demasiado como para preocuparse por eso. Tomando la mano de Jun, Min corrió hacia la puerta. En el camino, él dijo: —Todos son libres. Vayan a casa, tomen una ducha y duerman un poco, regresen aquí en la mañana. Ahora tengo que ir a hablar con los Guardianes.
Una vez que estuvieron fuera, él y Jun soltaron una carcajada.

—¿Viste la cara de Minwoo cuando los gemelos empezaron a acecharlo? —preguntó Jun.

Era algo que no tenía precio. ¿Quién hubiera imaginado que serían esos dos los que le bajarían los humos a Minwoo? Poniéndose serio, Min jaló a Jun a sus brazos. —Entonces, ¿querías decir lo que dijiste ahí? ¿Realmente me perteneces?

Jun asintió con un pequeño movimiento de cabeza. —Si, lo hago. Sólo necesito que me des tiempo y tomar las cosas con calma. Todavía estoy tratando con algo de esa mierda, así que no sé qué tan estable estoy.

Min besó la punta de la nariz de Jun. —Puedes tener todo el tiempo que necesites. Ya he esperado tanto tiempo por ti. Un poco más no me hará daño.

—¿Cuánto tiempo te has sentido atraído por mí?

—No puedo recordar un momento en que no te quisiera.

Jun frunció el ceño. —Pero yo pensaba que no me soportabas. Solías tratarme como si fuera una plaga.

—Eso era porque lo eras —Min bromeó.

Eso le valió un manotazo en el pecho. —Yo no lo era.

—¡Oh, por favor! Te gustaba jugar bromas todo el tiempo. Hubo un par de veces en la que me molesté tanto que casi te lanzo una sea serpent ( Sea serpent, aunque literalmente significa serpiente de mar, se puede referir a una criatura mitológica parecida a una monstruosa víbora o Dragón. que vive en las profundidades, Uno de estos monstruos es el del Lago Ness. Se deja el original) de mar del rio.

—Yo sólo quería llamar su atención. Si te hubieras detenido el tiempo suficiente hubieras notado que el noventa por ciento de las bromas que hacía eran hacia ti.

Min le dio otro beso, esta vez a los labios. —Esa es una loca manera de tratar de llamar la atención de alguien.

—Sí, bueno, no es como si nos enseñaran Aproximaciones románticas 501, junto con todos nuestros entrenamientos para la lucha. Yo estaba improvisando. — Jun hizo una pausa, ladeando la cabeza hacia un lado—. Espera. ¿Acabas de decir que hay una sea serpent en el río? Pensé que era sólo un mito.

Alejándose, Min comenzó a caminar a la sala de la otra reunión. —Oh, Snuggles (Snuggles. acurrucarse, como se usa de nombre se deja el original.) es muy real.

—¿Snuggles? ¿Qué clase de nombre es ese para una sea serpent? —preguntó Jun mientras lo seguía.


—No me preguntes. Fue un vampiro quien le dio ese nombre. Además, técnicamente, Snuggles es una serpiente de rio.

Cuando Jun se echó a reír, eso calentó a Min desde el interior. Había pasado mucho tiempo desde que oyó ese sonido con regularidad, tanto que Min no creía que nunca lo tomaría como garantizado de nuevo.


Continuara.....................