Para tener un humano. Capitulo 2

                      

                                       ♛Especial 1/2♛

                        

“Un chico guapo como tú tiene que saber cómo tomar un hombre grande abajo porque todo el mundo va a querer estar en tus pantalones.”

Su padre no podía ser la persona más diplomática, pero había enseñado a su hijo todo lo que sabía y eso le había salvado el culo más de una vez. Hyun le puso una mano en la espalda para guiarlo, pero no trató

de hablar hasta que abandonaron el ruidoso club.

-Tu banda es muy buena.

-Gracias -sonrió Saeng. -Estamos cada vez mejor. Nunca llegaremos a lo más grande, pero nos gusta tocar en clubs. Hay alcohol barato y el público es amable.

-¿Por qué no crees que puedan llegar a tener éxito? -La expresión de interés de Hyun le dijo a Saeng que el gran hombre realmente quería saber.

Saeng se encogió de hombros.

-Supongo que depende del grado de éxito que quieras. Creo que si vamos a tocar en los clubs, entonces tenemos éxito. Nunca vamos a tener un gran nombre porque es una cuestión de compromiso. Nos gusta la música, no me malinterpretes, pero todos tenemos otras metas en la vida. Me gustan los ordenadores, Kyu es un pintor, Jun está estudiando una licenciatura en física cuántica o algo así y Hongki es diseñador de paisajes. La música es nuestra pasión, pero no es nuestra vida. Con el fin de hacer algo grande, lo que se necesita, es demasiado.

La calle estaba tranquila mientras se alejaban del club. Sólo pasaban unos cuantos coches, lo que indicaba la avanzada de la noche. El aire frío hizo que Saeng tuviera escalofríos . Se había dejado la chaqueta en el escenario cuando se la quitó.

-Aquí. -En la chaqueta caliente de Hyun, el calor de su cuerpo envolvía a Saeng. -Siempre se me olvida que los seres humanos pueden tener frío. -Un comentario sarcástico bailaba en la punta de la lengua de Saeng,

pero podría ir en contra de la posibilidad de una noche caliente con el cambia-formas y eso le hizo mantener las palabras en su interior. Quizás el significado de las palabras de Hyun no eran como sonaban. No había razón para saltar a conclusiones.

-Hace frío -Saeng estuvo de acuerdo, acurrucándose en la chaqueta de Hyun.

-¿Qué haces con los ordenadores? ¿Programación?

-Algo por el estilo. -Más bien desprogramador. Eso era tema de discusión que no quería tratar con un desconocido. Sus habilidades de hacker no eran algo que le decía a la gente. Lo utilizaba en beneficio para las organizaciones, para revisar sus cortafuegos y verificar su seguridad, pero la mayoría de la gente oía la palabra piratería e inmediatamente pensaban que estaba dentro del espionaje o dispuesto a entrar en las cuentas bancarias.

Tampoco pretendía entrar en esa discusión con su ligue, no importaba lo guapo que el chico fuera. Cuanto menos información compartiera, menos riesgos corría.

-No vamos a hablar de mí. Vamos a discutir hacia dónde vamos, así me puedes joder. -Saeng pensaba que iban caminando a la casa de Hyun, puesto que ya habían pasado el estacionamiento hacía un tiempo y no se

dirigían a ninguno de los pocos coches aparcados en la calle. 

-Vivo justo ahí -Hyun señaló enfrente un alto y moderno edificio.

Saeng había visto construir los apartamentos de lujo años atrás. Parecían estar bien construidos, pero también parecían un poco impersonales.

-Bonito. -Parecía que estaba siendo afortunado. Cruzaron la calle y Hyun utilizó su tarjeta de acceso para abrir la puerta principal. Saeng aprobó la seguridad, aunque sabía que él podía descifrar el código en pocos

segundos. Pero el código mantendría apartado a la mayoría de la gente. Las puertas se cerraron automáticamente mientras cruzaban el vestíbulo. En el ascensor, cuando Hyun apretó el botón del número diez, Saeng mantuvo las manos en sí mismo. Nunca se sabía lo que la gente podría ver en las grabaciones de los ascensores. Saeng no se pondría en una posición dudosa en la que luego tendría que obtener acceso a ella para borrarla. 

Hyun llevó a Saeng por el pasillo. Las puertas estaban separadas en una buena distancia por lo que las residencias debían ser bastante grandes. Deteniéndose en mitad del pasillo, Hyun abrió la puerta y le hizo una seña a Saeng 

-¡Aquí estamos!

El apartamento de Hyun sorprendió a Saeng. El sitio tenía un ambiente estéril, el hombre nunca se quedaría allí. Muebles de cuero de alta calidad, suelos de madera y obras de arte en vidrio llenaban el apartamento.

Saeng quería llevar al magnífico cambia-formas a su casa y mostrarle lo que era un hogar de verdad. La mansión victoriana que su abuela le había dejado llena de carácter y calidez era lo que a Hyun le faltaba.

-No paso mucho tiempo en casa -dijo Hyun, como si le leyera la mente. Saeng se encogió de hombros. No era como si estuvieran saliendo o que fueran a vivir juntos. Si el hombre quería vivir en una morada con una

personalidad fría, no señalaría ese fallo.

Para sus propósitos, sólo necesitaría una buena cama y un poco de lubricante. Por suerte, los cambia-formas no contraían ni transmitían enfermedades por lo que un condón era opcional. Decidió que las acciones eran mejor que las palabras, así que Saeng se quitó la camisa.

-No eres muy hablador -dijo Hyun, divertido. 

-No soy más que el que actúa. ¿Qué hay de ti? ¿Quieres actuar también? -Saeng se acercó más hasta que estuvieron casi pecho contra pecho. 

-Oh, definitivamente -ronroneó Hyun. Bingo. Saeng tenía la atención del gran felino.

-No seas tímido, a ver lo que tienes. -Probablemente era la peor frase que jamás había utilizado, pero cuando Hyun se quitó la camisa y miles de músculos sexys fueron expuestos, Saeng tuvo que admitir que funcionó. Su erección se endureció contra la bragueta de sus muy ajustados pantalones vaqueros que incluso le preocupó que le cortara la circulación. La nariz de Hyun tembló y una amplia sonrisa se dibujó en su hermoso rostro.

-Oh, cariño, yo también te deseo.

Saeng dejó escapar un grito poco viril cuando Hyun lo levantó y se lo echó al hombro como un saco de harina.

-Hey -protestó Saeng. 

Hyun le dio una palmada en el culo. 

-Silencio.

-¿Silencio? -Saeng deseó haber traído su cuchillo, Hyun sería un excelente objetivo. No tendría mucho tiempo para anticiparse a la muerte del cambiador. Hyun corrió por el pasillo, luego bajó a Saeng en una gran cama con un gran colchón mullido. Los ojos de Hyun brillaban de satisfacción. 

-Hmm, como yo sospechaba.

-¿Qué?

-Te ves increíble en mi cama -Antes de que Saeng tuviera la oportunidad de hacer el comentario listillo que asomaba entre sus labios, Hyun quitó los zapatos de Saeng, y luego los arrojó por encima del hombro.

-No eres muy ordenado por lo que veo -dijo Saeng con una sonrisa.

-No cuando tengo mejores cosas que hacer que alinear tus zapatillas de deporte.

Hyun se quitó los zapatos, luego retiró el resto de su ropa sin contemplaciones. Saeng habría comentado la falta de romanticismo si la lujuria no le hubiera atragantado.

-Debo haber sido realmente un buen muchacho en otra vida -dijo Saeng, su mirada centrándose en la erección de Hyun.

-Ven por tu recompensa -lo convenció Hyun.

-Mmmm -Saeng hizo un movimiento con su mano, su boca ya estaba babeando más ante la idea de probar el líquido que rebordeaba la parte superior de la gran cabeza con forma de hongo. Después de Hyun, podría

estar arruinado para siempre para los demás. Hyun se dirigió hacia la cama, los genes de animal en su interior salieron a la superficie, mientras sus ojos brillaban con una luz depredadora. Cuando se acercó lo suficiente, Saeng se puso de rodillas y se arrastró hasta el borde de la cama. Envolvió una mano alrededor de la gruesa polla de Hyun. Le echó un vistazo a través de sus largas pestañas, y Saeng se la tragó hasta la raíz.

-¡Oh Jesús! -exclamó Hyun-Nunca he tenido a nadie que se la tragara toda antes. ¡Sí, chúpame!

A pesar del tono áspero de Hyun, puso una mano suave en la parte posterior de la cabeza de Saeng y deslizó los dedos por el cabello cuidadosamente. Saeng aumentó su succión hasta que Hyun aumentó la

presión para mantenerlo quieto.

-Para. Quiero meterme en tu interior. -Después de un ruido de protesta,

Saeng se quitó.

-Pero quiero probarte -se quejó. Hyun gimió.

-Por mucho que me gustaría que me tragaras, quiero follarte aún más. - Con movimientos rápidos y eficientes, Saeng se despojó del resto de su ropa.

Le costó un poco de esfuerzo desprenderse de los pantalones, pero Hyun se dedicó a ese trabajo. Cuando terminó, se detuvo a admirar su obra. 

-Fantástico. Eres grande por todas partes, ¿no es así? 

-Me alegro de que pienses así -respondió Saeng. Él tuvo su buena cantidad de atención pero desde que sus amigos habían surgido, él había muerto, y nunca pensó mucho acerca de sus propias miradas. Por la expresión de la cara de Hyun, el hombre no se encontró con ningún fallo. 

-Hay lubricante en mi mesita de noche.

-Estoy en ello -Saeng se escabulló hacia el cajón y lo abrió. Dio un grito de triunfo -¡Lo encontré! -Hyun le arrebató el bote de su mano.

-¡Hey! -exclamó Saeng.

-Ese culo es mío esta noche -insistió Hyun. -Dispararé sobre él, belleza.

Saeng resopló. -Creo que prefiero otra cosa.

-Y yo creo que te prefiero de rodillas y que me ofrezcas tu culo - respondió Hyun. Saeng hizo un gran suspiro antes de darse la vuelta y mover su trasero hacia Hyun. Este le golpeó el culo, el sonido produciendo

eco en la habitación.

-¡Hey! -objetó Saeng.

-Lo siento, no pude resistirme -sonrió Hyun.

-Menos ruido, más acción -insistió Saeng.

-Paciencia, dulce -Hyun frotó la mancha roja que causó. Saeng estuvo a punto de decir algo sarcástico, pero el alegre sonido de la parte superior del lubricante abierto detuvo sus palabras. Él no quería desanimar al hombre de esa acción. Él tenía la incómoda sensación de que Hyun se controlaría lo suficiente para parar el sexo que estaban teniendo sólo para darle una lección.

-Fácil -Hyun rodeó el agujero de Saeng hasta que empujó un dedo burlándose de él.

-En mí ahora -insistió Saeng. Hyun no le dirigió completamente su respuesta. En su lugar, deslizó un dedo dentro de él y lo torturó hasta que Saeng no pudo resistir la atención que le estaba dando. -¡Más! 

Un segundo dedo se unió al primero, y rápidamente un tercero. - Necesito tu polla. -gimió Saeng.

-Te daré lo que necesitas, no te preocupes -Saeng se relajó cuando la erección de Hyun presionó contra su agujero. -Ahora -Hyun suspiró mientras se deslizaba dentro. -Te sientes tan bien. Mejor de lo que nunca

sentí con ningún otro. 

-Adulador -gimió Saeng. La risa brotó por su piel cuando Hyun se frotó la cara contra el hombro desnudo de Saeng.

-¿Me estás oliendo? -preguntó Saeng.

-Maldita sea “recto” (Forma de decir hetero). Cuando salgas de aquí, vas a oler a mi durante días -Hyun dio un gruñido de satisfacción. El cambia-formas felino bombeó dentro y fuera de él como si su vida dependiera de que Saeng se viniera sin un toque. 

-Sigue así y no voy a durar -protestó Saeng.

-Bueno. ¡Vente! -Hyun mordió su hombro, enviando a Saeng por encima del borde.

-¡Oh, mierda! -Saeng maldijo cuando el semen brotó de su polla.

Hyun gimió y Saeng sintió humedad en su agujero. Con un suspiro, Hyun se salió, cayendo sobre el colchón junto a Saeng.

-Sabía que sería una mierda fantástica.

-Me alegro de poder demostrarlo -jadeó Saeng. Su corazón martilleaba en el pecho mientras se bajaba de su orgasmo. Su hombro le dolía por la mordedura de Hyun , pero también su cuerpo le dolía deliciosamente.

-Dame un poco de tiempo y vamos a hacerlo todo de nuevo -dijo

Dos horas más tarde, después de lo bien que jodieron, Saeng se sintió un poco culpable por escabullirse mientras Hyun dormía.

Continuara....................